CASR realiza por primera vez Monitoreo Electroencefalográfico Invasivo y Electrocorticografía Intraoperatoria para pacientes con Epilepsia Refractaria.
Actualmente el Centro de Referencia Nacional en Epilepsia de nuestro hospital cuenta con toda la gama de prestaciones tanto ambulatorias como quirúrgicas para brindarles una atención integral a nuestros pacientes. La epilepsia es una enfermedad neurológica crónica que afecta la corteza cerebral y que se manifiesta clínicamente por “crisis epilépticas”. En Chile afecta aproximadamente al 1% de la población.
Fecha: 1 de octubre 2020
Deimian tiene 21 años y a los 16 comenzaron sus crisis epilépticas que se intensificaron a los 18 cuando lo diagnosticaron de Epilepsia Refractaria. Desde ese minuto su vida cambió, ya que tuvo que adaptarse a las 3 o 5 crisis diarias, las cuales le dificultaron llevar una vida tranquila. “No podía estar mucho tiempo solo, me caía al suelo, lloraba, porque no podía controlar nada (…) Varias veces mis profesores me dijeron que era mejor que no siguiera estudiando por el riesgo que conllevaban las crisis, pero no les hice caso”, señala.
Sin embargo, hace un mes, tras la Cirugía de Epilepsia que se le realizó en nuestro establecimiento, sus crisis desaparecieron. Deimian está comenzando una nueva etapa mucho más tranquilo acompañado del equipo médico, quienes siguen su recuperación. “Estoy feliz, porque hace un mes no tengo ninguna crisis, ya puedo pensar en un futuro, en un trabajo, lo que tanto me costó encontrar, porque terminaban despidiéndome a causa de las crisis. Ahora mi familia está tranquila, porque puedo salir solo a la calle sin miedo a que me pase algo”, enfatiza el paciente.
Nuevos procedimientos
Deimian se convirtió en el primer paciente en someterse al estudio llamado Monitoreo Electroencefalográfico con Electrodos Invasivos. Éste consiste en colocar electrodos que contactan directamente la corteza cerebral, ubicados estratégicamente para detectar el origen de las crisis epilépticas. Con esta técnica, el equipo médico constituido por el neurofisiólogo y el neurocirujano, pueden tener una correcta correlación entre el tipo de crisis y su ubicación dentro del cerebro, facilitando la resección y siendo mucho más precisos a la hora de la cirugía.
En ese sentido, el Dr. Christian Cantillano, Director Quirúrgico del Centro de Referencia Nacional en Epilepsia del hospital, señala que “este monitoreo permite que la cirugía diseñada para combatir las crisis epilépticas del paciente sea mucho más precisa y además evitando posibles secuelas (…) Cuando estudiamos al paciente, tenemos una primera cirugía para colocar los electrodos invasivos y así registrar las crisis, las localizamos en zonas precisas del cerebro, diseñamos un plan quirúrgico individualizado que presentamos al paciente y luego volvemos a pabellón una semana después para operarlo”.
El colocar electrodos en contacto con el cerebro permite dos cosas: monitorizar el origen de las crisis epilépticas y además evaluar si existen áreas funcionales cercanas al foco de epilepsia que se puedan ver afectadas por la cirugía. Este trabajo lo realiza el Dr. Reinaldo Uribe, neurofisiólogo y Director Médico del Centro de Referencia Nacional en Epilepsia, quien señala que “nuestro hospital tiene una sala especialmente adaptada para realizar monitoreo electroencefalográfico a pacientes con epilepsia refractaria. Aquí nosotros detallamos el origen de las crisis y revisamos al estimular eléctricamente el cerebro qué áreas funcionales están involucradas, como el lenguaje, las habilidades motoras o visuales del paciente, para que cuando se opere sepamos qué lugar de su cerebro no podemos tocar y así no afectarlo”.
El Complejo Asistencial Dr. Sótero del Río (CASR) tiene un importante número de pacientes que no eran candidatos a la cirugía de epilepsia por no contar con este monitoreo electroencefalográfico. Sin embargo, ahora podrán tener acceso pacientes de nuestra área y también del resto de Chile. “Antes, los pacientes se operaban en el sector privado con un costo altísimo y ahora pueden acceder a través de la red pública… Nuestro hospital es uno de los dos que existen en Chile para ofrecer este procedimiento (…) Actualmente tenemos lista de pacientes que esperamos operar a corto plazo. Nuestro objetivo es hacer al menos una cirugía a la semana con este monitoreo electroencefalográfico”, enfatiza el Dr. Cantillano.
Electrocorticografía Intraoperatoria
Otro procedimiento que también realizó este mes el CASR, y que lo convierte en el primer hospital público de Chile en desarrollarlo, fue la Electrocorticografía Intraoperatoria, la que se practicó a un paciente pediátrico de 11 años, quien, al igual que Deimian, sufría de epilepsia refractaria.
Este procedimiento es de suma importancia en algunas cirugías de epilepsia donde se tiene una lesión cerebral. Los focos de las crisis no se logran ver cuando uno mira directamente el cerebro y pueden estar cercanos o alejados de la lesión. En este caso, al paciente durante su cirugía se le colocan unos electrodos en contacto con el cerebro para registrar la actividad neuronal en vivo cuando está en pabellón. Esa es la diferencia respecto al Monitoreo descrito previamente, que se realiza días previos a la cirugía.
“Esto ayuda a encontrar las zonas con descargas epilépticas que deben ser removidas durante la cirugía (…) Para ello trabajamos en conjunto, el cirujano de epilepsia y el neurofisiólogo, decidiendo qué zonas están alteradas para ser resecadas y también evitando lesionar áreas que tengan una función importante”, señala el Dr. Uribe.
Agrega que estos nuevos procedimientos son únicos en la red pública de salud y permitirán a los pacientes Fonasa optar a ellos. “Seguimos creciendo en el Centro de Referencia Nacional en Epilepsia al completar las prestaciones más complejas que requieren los pacientes con epilepsias refractarias (…) Contamos con un equipo multidisciplinario especializado para dar respuesta a las necesidades específicas de nuestros pacientes”, puntualiza.
Todo lo anterior, no podría haber sido posible sin el soporte continuo del Ministerio de Salud quienes apoyaron con la compra de un equipo electroencefalográfico de última tecnología, la Pontificia Universidad Católica de Chile por facilitar los implementos para poder llevar a cabo ambos procedimientos y a los equipos de medicina intensiva y anestesiología, tanto en adultos como pediátricos, que apoyaron las intervenciones.
Ambos especialistas coinciden en que lo más importante de todo es devolverles la independencia a los pacientes. Lograr la libertad de crisis y reducir los fármacos que permitirán mejorar su calidad de vida. “Sin duda para mí es un cambio de vida, no tener crisis epilépticas es un gran avance en mi vida y todo se lo debo a estos doctores que me han ayudado durante todo este tiempo”, finaliza Deimian.