Caroline Davidson, profesora de derecho de la Universidad de Willamette, Estados Unidos, el pasado 11 de abril expuso su experiencia como persecutora en el Tribunal Penal Internacional para la ex Yugoslavia en el juicio por genocidio y crímenes de lesa humanidad, ante un auditorio formado por más de 60 académicos y estudiantes de la Facultad de Medicina.
Fecha: 20 de abril 2018
Davidson inicia su exposición señalando la importancia de conocer los Sistemas Regionales e Internacionales de Protección de los derechos humanos, su competencia, limitaciones y recursos y los delitos de genocidio, crímenes de guerra y de lesa humanidad. También describió elementos del derecho penal internacional entre esos, penas restrictivas de libertad, ejecución de las mismas, prescripción de la acción penal, reparación a las víctimas e incentivó la discusión sobre dichos elementos.
Los presentes compartieron sus distintas visiones ante delitos tan graves como el caso de la masacre de Srebrenica, haciendo una revisión guiada de algunos acusados claves de este hecho y cómo se desarrolló el proceso de su juicio y sentencia.
Jorge Martinez Barrera, profesor del Magister de Bioética, estuvo presente en la actividad y planteó una interrogante posterior: “Se pudo ver las grabaciones de testimonios, especialmente las de los criminales. Uno de ellos expresaba, en la grabación, su profundo arrepentimiento y pedía perdón a sus víctimas. ¿Eran sinceros ese arrepentimiento y ese pedido de perdón? ¿Qué lectura podríamos hacer de ellos?”.
Para Barrera resaltó dos reflexiones: “¿Cuál es la medida humana del castigo para un crimen que es imposible perdonar? ¿Acaso la pena de muerte guarda alguna proporción con la matanza masiva de inocentes? ¿Qué hacer cuando se debe juzgar el asesinato de otros que ni siquiera pueden ser presentados como “enemigos”? La segunda reflexión que cabría hacer es que los criterios jurídicos -de algún modo hay que llamarlos- de estas Cortes Internacionales no responden a las expectativas del común de las personas más o menos versadas en el derecho. Posiblemente el mensaje de la Sra. Davidson al público chileno fue de este tenor: “Señores, les estoy mostrando el modo como juzgamos, para que vean que estas instituciones internacionales se mueven con criterios muy distintos a los que ustedes están habituados.”
Los participantes, entre esos los estudiantes del Magíster de Bioética, agradecieron la oportunidad de conocer de primera persona la experiencia internacional de protección a los más débiles en el sistema internacional y la instancia para reflexionar y discutir temas de derechos humanos.