Medicina Familiar
Los antiinflamatorios no esteroidales han sido clásicamente usados para el manejo agudo de la fiebre en niños. En este artículo revisaremos la última evidencia disponible de su uso para el manejo de la fiebre infantil.
12 de diciembre de 2017
INTRODUCCIÓN
La fiebre corresponde a una elevación de la temperatura basal del cuerpo, en respuesta a un proceso patológico de orden inflamatorio, que en la mayoría de los casos se asocia a una causa infecciosa1. La elevación de la temperatura corporal se explica por la generación de pirógenos endógenos y exógenos asociados al proceso patológico, los que elevan el set point hipotalámico, determinando2:
La fiebre ha sido clásicamente manejada con antiinflamatorios no esteroidales, los que inhiben la síntesis de prostaglandinas E23, disminuyendo el set point hipotalámico y generando un efecto antipirético.
MANEJO DE LA FIEBRE
En población infantil los fármacos antipiréticos más ampliamente utilizados son el Paracetamol y el Ibuprofeno. La Tabla nº 1 muestra las principales propiedades de ambos fármacos para el manejo de la fiebre.
Tabla 1: Propiedades farmacológicas de Paracetamol e Ibuprofeno para el manejo de la fiebre en población infantil4.
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Paracetamol |
Ibuprofeno |
Dosis de uso |
10 a 15 mg/kg/dosis |
5 a 10 mg/kg/dosis |
Intervalo de administración |
4 a 6 horas |
6 a 8 horas |
Tiempo para alcanzar máxima concentración plasmática |
30 minutos |
60 minutos |
Tiempo para alcanzar máximo efecto antipirético |
2 horas |
3 horas |
Duración Efecto |
4 a 6 horas |
4 a 8 horas |
Edad de uso seguro |
> 3 meses |
> 6 meses |
Fuente: Elaboración propia a partir de la referencia citada.
¿QUÉ DICE LA EVIDENCIA?
Paracetamol e Ibuprofeno son considerados fármacos maduros, esto significa que la dilatada experiencia clínica en relación con su uso sustenta su efectividad. Es por esto, que no existen estudios actuales que evalúen su eficacia en el manejo de la fiebre.
Diclofenaco es otro de los antiinflamatorios no esteroidales (AINES) con efecto antipirético, y de amplio uso. Su uso ha sido mayormente estudiado, sin embargo, respecto de su efecto analgésico más que del antipirético.
No existen a la fecha, estudios que evalúen el efecto antipirético de diclofenaco en su presentación oral para población infantil. Un estudio primario comparó el efecto de diclofenaco rectal con paracetamol5, mostrando que el primero tenía una acción más rápida y pronunciada para el manejo agudo de la fiebre, sin embargo, ambos eran igualmente efectivos.
Una revisión sistemática, que analizó la asociación del uso de distintos AINES con la aparición de complicaciones gastrointestinales6, mostró que en el grupo que utilizaba diclofenaco el riesgo relativo de presentar estas complicaciones era cercano al doble en comparación a ibuprofeno (RR 4,2 [3,03 – 5,83] y 1,88 [1,00 – 3,51] respectivamente). Parece razonable, en función de esta revisión, privilegiar eventualmente el uso de paracetamol o ibuprofeno, por sobre diclofenaco.
¿CUÁNDO UTILIZAR UN ANTIPIRÉTICO ÚNICO Y CUÁNDO ASOCIARLO?
Una revisión sistemática con metaanálisis7, de buena calidad metodológica, analizó el posible efecto clínico superior de un esquema antipirético asociado alternado o combinado de paracetamol e ibuprofeno en comparación con el uso individual de uno de ellos. Los resultados mostraron:
Los autores de esta revisión sistemática concluyen que existe alguna evidencia para afirmar que tanto la terapia antipirética alternada, como la combinada, pueden ser más efectivas que la monoterapia con paracetamol o ibuprofeno para reducir la temperatura en pacientes febriles. Los estudios primarios incluidos en este metaanálisis son, sin embargo, de baja calidad metodológica. de modo que son necesarios nuevos estudios para fortalecer la evidencia en relación a este efecto.
En cualquier caso, el uso alternado o combinado de ambos fármacos pudiera prestarse a confusiones para los cuidadores, por ende, su recomendación debe ser cuidadosa
RESUMEN
REFERENCIAS: