Estudiantes de pre y postgrado pueden practicar los tres pilares de esta nueva especialidad durante sus rotaciones en el Complejo Asistencial Dr. Sótero del Río.
Fecha: 13 de septiembre 2017
El doctor Juan Carlos Claro, académico del Departamento de Medicina Interna UC, define su caballo de batalla: ayudar a que todos los estudiantes de Medicina UC egresen con conocimientos y herramientas básicas derivadas de la Medicina Narrativa, una especialidad en la que se formó en Estados Unidos bajo la tutela de la doctora Rita Charon.
El Dr. Claro estudió Medicina Narrativa en el único magíster que existe sobre el tema, impartido por la Universidad de Columbia, en Estados Unidos. Ahora, pone en práctica sus conocimientos en la atención diaria y los transmite a alumnos de pre y postgrado que realizan rotaciones en el Complejo Asistencial Dr. Sótero del Río.
“La Medicina Narrativa considera al paciente no tanto como una enfermedad o como un examen alterado, sino como una persona con una historia y un contexto que evidentemente influyen en cómo ha acabado delante de mí”, explica el Dr. Claro.
Para poder lograr este fin, en su formación los estudiantes echan mano de “grandes historias”, entendiendo que la labor de leer, escuchar o ver y comprender permiten afinar el oído cuando se enfrentan a la narrativa, tal vez no tan detallada, de sus pacientes y pueden ponerla en contexto, identificar narradores, responder quién, cómo y por qué.
Aunque, la escucha activa de los pacientes no signifique psicoterapia, el Dr. Claro sí considera que muchas veces el solo oír puede ser terapéutico. Es parte del trabajo de medicina narrativa encontrar signos en esta escucha de otras patologías que excedan su campo en caso de ser necesario: como bien puede ser psicoterapia o alguna otra especialidad.
“Como médicos estamos acostumbrados a escuchar la historia a nuestra pinta, sacando los datos que nos convienen, y no sabemos leerla como la cuenta el paciente. Con las preguntas que usualmente se hacen tratamos de reconducir lo que nos dicen para que cuadre con nuestro esquema, cuando lo que debemos hacer es adaptarnos a ese paciente”, recalca el Dr. Claro.
Durante sus clases, el Dr. Claro y sus estudiantes leen, escuchan o ven historias y practican los tres pilares de la medicina narrativa: la atención (escucha activa), representación (discusión y escritura) y afiliación (cómo retorno esto que se ha generado en mí de vuelta al paciente).
Esta práctica también crea un vínculo entre los médicos, residentes o estudiantes que pueden compartir experiencias con sus compañeros y empatizar con ellos.
“Yo creo que todos los médicos pueden tener esto, yo tengo quizás una formación más sistemática en el tema de los textos… pero todos los médicos tendrían que ser capaces de tener estas herramientas básicas para relacionarse con otros o con el paciente”, insiste el Dr. Claro.
¡El Dr. Juan Carlos Claro conversó con La Tercera sobre este tema, puedes leer esta entrevista acá!