Artículos, Medicina Familiar
Una parte importante de los pacientes con enfermedades crónicas complejas no oncológicas requiere una aproximación precoz de cuidados paliativos, por lo que es importante sistematizar la identificación de éstos y reconocer sus múltiples necesidades para un abordaje temprano e integral.
La definición de Cuidados Paliativos ha ido transformándose en el tiempo, pasando de ser una atención especializada enfocada en pacientes con enfermedades terminales de acuerdo a su pronóstico, a un modelo de atención entregado en cualquier nivel de atención, cuyo objetivo es mejorar la calidad de vida de los pacientes y sus familias, incorporando a las personas con enfermedades crónicas progresivas y complejas, para prevenir y tratar el dolor y otros problemas del área física, psicosocial y espiritual.1-3
A nivel mundial existe una gran necesidad de cuidados paliativos (56,8 millones de personas en 2017), la mayoría de edad avanzada (70 años o más), con enfermedades crónicas no transmisibles (no oncológicas), y de países de bajos y medianos ingresos.4 En Chile no existen datos sobre este aspecto, pero se sabe que a nivel latinoamericano se encuentra bien posicionado por la existencia desde el 2005 de las Garantías Explícitas en Salud (GES) de alivio del dolor y cuidados paliativos por cáncer avanzado, por una buena distribución de opioides (indicador de acceso a cuidados paliativos) y la posición Nº27 en el mundo (primero de Latinoamérica) en el índice de calidad de muerte (que evaluó el desarrollo de cuidados paliativos, recursos humanos, acceso, calidad del cuidado y participación de la comunidad).5-7
Sin embargo, las personas con enfermedades crónicas, no incluidas en el GES, podrían requerir cuidados con mirada paliativa durante la trayectoria de su condición, siendo posible identificarlos y manejarlos en atención primaria (APS).8,9
Identificación de necesidades paliativas
En el modelo observado en la figura 1, se promueve la identificación precoz de la situación de enfermedad avanzada que conducirá al final de vida, determinada por la primera transición, desde donde se realiza una aproximación paliativa progresiva. La segunda transición, dado por la situación de muerte próxima, determina un enfoque paliativo exclusivo, pero es mucho más tardío en responder a las diversas necesidades de los pacientes y sus familias.10,11
Figura 1. Fases del cuidado y transiciones en cronicidad y pacientes terminales.8,11
Fuente: Elaboración propia a partir de las fuentes citadas.
El ingreso temprano a cuidados paliativos ha mostrado una tendencia a mejorar la calidad de vida y disminuir la intensidad de síntomas a 3 meses de la intervención, con baja calidad de la evidencia.12 Por otro lado, los clínicos tienden a tener una mirada más optimista del pronóstico, sobrestimando la sobrevida, por lo que se requieren herramientas para una mejor identificación de los pacientes con necesidades paliativas.13
Si bien existen múltiples instrumentos que han sido utilizados en APS, se recomienda utilizar la herramienta NECesidades PALiativas (NECPAL)-CCOMS-ICO 3.1®, puesto que fue validado en Chile mediante la adaptación cultural y evaluación de su confiabilidad, validez de contenido y factibilidad.14 Esta prueba fue desarrollada en Cataluña, se basa en dos instrumentos (Supportive and Palliative Care Indicators Tool – SPICT y Prognostic Indicator Guidance at the Gold Standards Framework – GSF PIG) y combina la pregunta sorpresa con indicadores clínicos de severidad y progresión.15 En este link se encuentra disponible el instrumento NECPAL-Chile para su descarga.
La pregunta sorpresa (PS) consiste en responder la pregunta “¿Le sorprendería que este paciente muriese a lo largo del próximo año?”, siendo positiva si la respuesta es “no” (es decir, no me sorprendería que el paciente muriese dentro de un año). Esta única pregunta ha demostrado tener por sí sola una sensibilidad del 67% (95% IC 55,7 – 76,7) y especificidad de 80,2% (95% IC 73,3 – 85,6%) para reconocer a personas con necesidades paliativas, ahora bien, utilizando como gold standard la sobrevivencia entre 6 y 18 meses.16
Un NECPAL se considera positivo cuando la PS es positiva junto a 1 o más de los 9 criterios, que se resumen a continuación:
Demanda Expresión de limitación de esfuerzo terapéutico o atención paliativa del paciente, familia o equipo. |
Síndromes geriátricos ≥ 2 de los siguientes por > 6 meses: Caídas, úlceras por presión, disfagia, delirium, infecciones a repetición. |
Multimorbilidad ≥ 2 enfermedades: Cáncer, enfermedad pulmonar obstructiva crónica, insuficiencia cardíaca, enfermedad renal crónica. |
Declive funcional Deterioro de Karnofsky o Barthel >30% o pérdida de ≥ 2 actividades básicas de la vida diaria. |
Síntomas persistentes ≥ 2 síntomas persistentes o refractarios en cuestionario de Evaluación de Síntomas de Edmonton. |
Uso de recursos ≥ 2 hospitalizaciones urgentes o no planificadas en últimos 6 meses o aumento de demanda/intensidad de intervenciones. |
Declive nutricional Pérdida de peso >10%. |
Dependencia severa Barthel <20 o Karnofsky <50. |
Indicadores específicos De severidad y/o progresión de enfermedad. |
La aplicación del NECPAL debe realizarse por profesionales médicos o de enfermería, quienes responden sin necesidad de exploraciones complementarias y teniendo un conocimiento previo del paciente. El NECPAL (+) activa la visión paliativa para la instauración progresiva y gradual de este enfoque, por lo que no contraindica tratamientos curativos ni indica la necesidad de un equipo especializado en cuidados paliativos.15,17
Evaluación de necesidades
Una vez identificado el paciente, es relevante realizar una evaluación multidimensional, para poder otorgar una atención integral y centrada en la persona, con el objetivo final de mejorar la calidad de vida, entendida como la posibilidad de vivir experiencias gratificantes independiente de la situación funcional.18>
Esta evaluación se basa en los aspectos que incorpora la Teoría del Dolor Total, en que se reconoce que el individuo que sufre no sólo experimenta dolor físico, sino que además existe sufrimiento en los ámbitos psicológico, social y espiritual.19
Además de la revisión de los antecedentes de salud, es relevante evaluar los síntomas y la funcionalidad:
Posteriormente, cada síntoma debe evaluarse en cuanto a sus características específicas (frecuencia, inicio, factores que lo modifican, duración, etc.) y al impacto global, además del impacto en lo funcional, psicológico, espiritual y familiar.
La aplicación seriada del ESAS permite realizar un seguimiento del control de síntomas y evaluar la utilidad de las medidas implementadas para ello.
Figura 2. Cuestionario Edmonton Symptom Assessment System (ESAS)22
También pueden utilizarse otras escalas, como el Índice de Barthel, que evalúa las actividades básicas de la vida diaria (ABVD).
Figura 3. Escala ECOG21
Figura 4. Karnofsky Performance Status21
Incluye la revisión del aspecto cognitivo, las reacciones emocionales y de adaptación a la enfermedad, junto con distinguir la presencia de trastornos del ánimo o de ansiedad y delirium. Se resumen los aspectos más relevantes de esta evaluación:
Adaptación a la enfermedad |
El enfrentarse a una enfermedad potencialmente mortal suele vivirse como un hecho traumático y catastrófico inicialmente, generando un proceso de adaptación donde pueden presentarse diversas reacciones psicológicas (negación, resignación, agresividad, aceptación, tristeza, etc.). La adecuada adaptación se asocia a bienestar emocional, espiritual y funcional. |
Grado de información |
Conocer qué sabe, cuánto sabe y qué significado le da a la información que tiene, ayuda a entender las diversas reacciones y la toma de decisiones del paciente. |
Evaluación cognitiva |
Es fundamental para adecuar el tratamiento y las decisiones en salud, por ejemplo, en el ajuste de fármacos que puedan precipitar delirium. Pueden aplicarse test para una aproximación más objetiva, existiendo múltiples herramientas disponibles. En Chile se encuentran validados el Mini-Mental y el test de Pfeffer, pero no en pacientes con enfermedades avanzadas.24 Existe infradiagnóstico del delirium en pacientes avanzados, catalogándose erróneamente como depresión o fatiga, por lo que debe sospecharse para poder identificar potenciales precipitantes y realizar un manejo adecuado. Se puede utilizar la herramienta Confussion Assessment Method (CAM), validado en pacientes en cuidados paliativos. |
Trastorno depresivo y trastornos ansiosos |
Es habitual que los pacientes que se enfrentan a enfermedades graves reaccionen con tristeza, desánimo y angustia, e incluso ansiedad ante la incertidumbre de la evolución, de los tratamientos, efectos adversos, etc. Se deben diferenciar los estados normales de ansiedad y depresión de los trastornos, en donde la intensidad o la duración de los síntomas es excesiva y generan deterioro en la funcionalidad de la persona. Los criterios del CIE-10 o DSM 5 orientan estos diagnósticos. |
No sólo sufre el enfermo, sino que también su familia y cuidadores, que acompañan durante el proceso desde que se presentan los primeros síntomas, posteriormente en el cuidado y finalmente en la muerte. En esta evolución puede existir sobrecarga y también sufrimiento en todos los aspectos en los familiares.
Se debe evaluar la estructura familiar, los estilos de comunicación, la adaptación a la crisis, y considerar los aspectos económicos, ya que muchas veces existen cambios en el ingreso familiar y aumento en los gastos. No olvidar aspectos como la conspiración/cerco del silencio (ocultamiento de información al paciente) y la claudicación familiar (respuesta inadecuada a las necesidades del paciente).18,23
En relación con lo laboral, en julio del 2021 se aprobó la ley Nº 21.309 que establece que afiliados y pensionados calificados como enfermos terminales, catalogados como NECPAL-Chile positivo, tienen derecho a pensión anticipada (calculada para 12 meses) y al retiro de fondos de AFP (del excedente de esos 12 meses de pensión).25 Para hacer efectivo este beneficio, se debe realizar el trámite a través de la AFP correspondiente.
La espiritualidad no es lo mismo que la religión, pero puede incluir un componente religioso, y está vinculada con el significado y propósito de la persona. A veces pueden surgir preguntas existenciales por parte del paciente que invitan a profundizar la evaluación espiritual, o bien la presencia de símbolos religiosos pueden abrir esta puerta.18,23 Sin embargo, también se puede explorar de forma dirigida a través de cuestionarios, uno de ellos es el Cuestionario del Grupo Espiritual SECPAL (GES, disponible online) que contiene preguntas abiertas iniciales para facilitar la conversación, y posteriormente 8 afirmaciones en que el paciente debe valorar en qué grado se siente identificado. Se debe recordar al paciente que no existen respuestas correctas o incorrectas y que el objetivo es generar reflexión y diálogo, más que obtener todas las respuestas categóricas.26
La valoración espiritual no sólo pone en evidencia las necesidades, sino que también surgen recursos espirituales que pueden contribuir a mejorar la calidad de vida de estos pacientes, promoviendo el reconocimiento de la persona, su dignidad y transcendencia.
Conclusiones
Referencias