Síndrome de estrés post -traumático afectó al 7,3 % de las madres de niños preescolares tras el terremoto del 27F
Fecha: 28 de febrero 2014
Los resultados del estudio realizado por la Escuela de Medicina UC, señalan que existe una asociación importante entre este síndrome y la presencia de acciones coercitivas hacia los niños por parte de sus cuidadores. También se mostró que el evento produce un efecto halo, donde el impacto es mayor en el área del epicentro de la catástrofe, pero que éste se expande afectando a mayor población.
La investigación “Estrés post-traumático post terremoto 27F en cuidadores de niños preescolares: factores asociados del cuidador, la familia y la crianza”, se publicó en la revista Chilena de Pediatría durante 2013 y luego el equipo que la realizó, siguió con un monitoreo en los aspectos detectados durante todo el año pasado. El estudio del Departamento de Salud Pública, fue liderado por la pediatra y salubrista, Paula Bedregal, junto a las sicólogas Camila Carvallo y Viviana Hernández. También se sumó la socióloga, Paulina Prado.
El objetivo de la investigación fue detectar la frecuencia de estrés post 27F en las madres de niños preescolares del país que vivían fuera del epicentro (VIII y VII Regiones), y su relación con el funcionamiento familiar e indicadores de riesgo de maltrato infantil.
El estrés post traumático (EPT) es muy común luego de una catástrofe, sin embargo hay un factor central poco estudiado que corresponde al efecto que el trastorno de estrés post-traumático (TEPT) de padres o cuidadores de niños y niñas tiene en el grupo familiar. Estas personas reportan con mayor frecuencia depresión, psicosis y conductas antisociales en los miembros de la familia lo que provoca problemas de conducta en los niños.
El estudio encontró una frecuencia de síndrome post-traumático (SPT) en madres de 7,3%, siendo mayor el SPT en zonas en que hubo desastre en infraestructura producto del terremoto. Sin embargo, un monitoreo realizado durante todo el 2013, permite concluir que existe un efecto de halo. Es decir las consecuencias en la salud de las personas es mayor en quienes moran en el epicentro, pero esto se expande hacia afuera afectando una población mayor.
Tener estos datos es importante a la hora de planificar mejores políticas públicas ante un desastre, sostiene la pediatra. El estudio también arrojó asociaciones significativas entre tener SPT, peor funcionamiento familiar y presencia de creencias coercitivas respecto de la educación de los niños por parte de las madres. Este índice fue mayor al 0,05%.
Entre las conclusiones que se extraen del monitoreo realizado durante todo el 2013, Bedregal indica que “cuando hay una catástrofe hay un aumento del SPT, no necesariamente en las zonas más afectadas”.
Tras estos resultados, la Dra. Bedregal indica que se podría considerar al estrés post-traumático observado después de un desastre como un marcador de riesgo para maltrato infantil y disfunción familiar.
Para ver estudio pinche aquí.