La disfunción circulatoria aguda está presente en todas las enfermedades críticas en distinto grado, y su no reconocimiento, inadecuado monitoreo y mal manejo, pueden aumentar la morbimortalidad, haciendo crucial que quienes trabajen en la UCI sepan ejecutar un buen monitoreo hemodinámico.
Fecha: 4 de agosto 2017
Existe una clara evidencia de que los resultados clínicos y la eficiencia en el uso de los recursos de cuidados críticos mejoran significativamente cuando son manejados por personal calificado, y específicamente, un buen manejo hemodinámico cardiovascular de los pacientes críticos, es vital para la sobrevida.
“Los pacientes críticos pasan por etapas. Cuando un paciente tiene una disfunción cardiovascular grave, inicialmente es atendido por médicos de urgencia o de atención primaria, con medidas de primer orden que logran sacar aproximadamente a un 40% de los pacientes de su situación crítica”, comentó el Dr. Glenn Hernández, jefe del programa.
“Sin embargo, hay un 60% de pacientes que terminan siendo trasladados a la UCI porque su disfunción cardiovascular persiste. Entonces, en la UCI se requieren otras competencias, se requiere una interpretación mucho más profunda de los parámetros que nosotros medimos en los monitores”, agregó el doctor.
El curso contará con un equipo docente de primer nivel, compuesto por tres invitados internacionales y médicos UC, quienes trabajarán de manera práctica y cercana con los alumnos, mediante estaciones experimentales rotantes con temas y objetivos específicos.
Además se discutirá sobre temas de frontera, ya que ha habido muchos cambios conceptuales en la materia que deben ser actualizados en los alumnos y que les permitirá acercarse a nuevas perspectivas y al manejo fino de pacientes con disfunción cardiovascular aguda.
El curso que está dirigido a médicos y profesionales que trabajan en las Unidades de Cuidado Intensivo de instituciones tanto públicas como privadas del país, se realizará desde el 31 de agosto hasta el 02 de septiembre de 2017.