“La Pediatría no es una especialidad médica más. Ella es la medicina de una edad de la vida”.
Dr. Juan de Dios Vial Correa, 11 de Junio de 1987.
Nuestro equipo de Pediatría UC ha realizado importantes contribuciones al desarrollo de la Pediatría del país, tanto en la formación de profesionales, como en la generación de capacidades técnicas que permiten incorporar permanentemente nuevos conocimientos de diagnóstico y tratamientos.
Queremos destacar que todos estos logros son el resultado de un trabajo en equipo en el que, junto a los médicos, participan enfermeras, matronas, auxiliares técnicos, personal de laboratorio, psicólogos, educadores, kinesiólogos, secretarias, administrativos y en particular muchos de nuestros alumnos de pre y postgrado.
Jefe de Departamento: Dr. Andrés Castillo M.
La Pediatría Ambulatoria es una parte fundamental del quehacer del pediatra, una de cuyas responsabilidades es acompañar y guiar a las familias en el proceso de crecimiento y desarrollo de los hijos.
Actualmente concurren a este servicio la mayoría de las subespecialidades pediátricas, con un fuerte acento en la docencia de pregrado y postgrado de Pediatría y subespecialidades pediátricas, ofreciendo así una completa atención a nuestros pacientes, desde la pediatría general a la subespecialidad, incluyendo la atención al niño enfermo. Además se cuenta en la actualidad con programas de seguimiento de pacientes prematuros y niños con necesidades especiales.
La trayectoria de la unidad ha contribuido a configurar un equipo sólido y muy comprometido con la salud de nuestros pacientes pediátricos y con la docencia de pre y postgrado. Cabe destacar que además, continuamente acuden a nuestro centro internos y residentes de otros centros universitarios de Chile y del extranjero, buscando aprender de la experiencia de este equipo de profesionales.
En 1982, la Universidad Católica fundó el Centro de Diagnóstico (CEDIUC, actual Centro Médico San Joaquín), lugar destinado a la atención ambulatoria de excelencia, iniciándose entonces la actividad de Pediatría Ambulatoria, con Pediatras y Enfermeras a cargo de la atención de niños. Pronto se sumaron atenciones con énfasis en el fomento del autocuidado y prevención en salud con atención del Recién Nacido y Clínica de Lactancia. Ha sido y continúa siendo hasta la fecha, centro de docencia para médicos y enfermeras de todo el país.
En 1986 se integra al Equipo de Pediatría Ambulatoria el Dr. Enrique Fanta Núñez, con su amplia experiencia clínica-docente desde el Hospital Roberto del Río, y como pediatra reconocido tanto en Chile como en Latinoamérica. El Dr. Fanta contribuyó a ordenar y estructurar la actividad docente en Pediatría Ambulatoria (PA) dándole un espíritu más académico.
En 1993 se inaugura la atención preferencial hacia el Niño Enfermo, aumentando progresivamente el sello docente-asistencial que caracteriza el quehacer de nuestra Unidad
En el año 2000 se publica el primer “Manual de Supervisión de Salud del Niño y Adolescente”, cuyos editores formaban parte del equipo de PA y ese mismo año se realiza el primer Curso Internacional de Pediatría Ambulatoria con invitados internacionales y que concita gran afluencia de participantes.
El año 2011 se publica el Libro “Pediatría Ambulatoria: un enfoque integral”, realizado por un grupo de profesionales, incluyendo a todos los actuales miembros del equipo de PA, libro que ya está en su 3ra Edición y que es una útil herramienta de apoyo para médicos generales y pediatras.
Esta Unidad constituye un centro de alta complejidad que recibe a pacientes con diversas patologías, incluyendo a pacientes con enfermedades crónicas o necesidades especiales.
El equipo está integrado por pediatras hospitalistas, capaces de atender y resolver en forma global la gran mayoría de las enfermedades de los pacientes, contando con el apoyo de subespecialistas altamente calificados de todas las áreas pediátricas.
Los cuidados hospitalarios del niño/adolescente y su familia se llevan a cabo en un modelo multidisciplinario del que participan, además de los pediatras, enfermeras, auxiliares, kinesiólogos, nutricionistas, terapeutas ocupacionales, especializados en cuidados hospitalarios pediátricos. Además, ofrece apoyo de psicólogos, psicopedagogos, educadores diferenciales y asistentes sociales.
El Servicio de Pediatría del Hospital Clínico UC se inaugura en julio de 1987, en el séptimo piso del edificio de calle Marcoleta, con el propósito de cumplir un rol asistencial, docente y de investigación permanente.
En lo asistencial, el Servicio de Pediatría atiende en forma integral y multidisciplinaria a niños en distintas etapas del desarrollo desde recién nacidos hasta los 15 años. Los pacientes provienen principalmente desde el Servicio de Urgencia y programas de atención GES (cardiopatías, asma, diabetes).
También en sus dependencias funciona la Escuela Hospitalaria Juan Francisco Fresno que cumple dos importantes funciones: brinda educación escolar a pacientes de nuestra red -hospitalizados o ambulatorios- que por diversas razones no han podido reinsertarse en el sistema escolar habitual y realización de ludoterapia a los niños hospitalizados en forma diaria. Todo lo anterior ha contribuido a crear un ambiente más agradable para el paciente y su familia durante la hospitalización.
El Servicio de Pediatría es también campo clínico docente de la Pontificia Universidad Católica para alumnos de medicina de pregrado y postgrado, así como también para carreras asociadas a la salud como kinesiología, enfermería, nutrición, TENS y educación de párvulos, generándose instancias de aprendizaje y actualización permanente y multidisciplinaria. La docencia se realiza en forma tutorial, diaria y presencial con cobertura durante todo el año.
Dentro de nuestro rol universitario y con el apoyo de diversas subespecialidades, la Unidad de Pediatría Hospitalaria es campo de investigación en distintas áreas de la pediatría. En la actualidad cuenta con 17 camas pediátricas, con lo que se logran aproximadamente 2000 egresos por año.
La Unidad Académica de Paciente Crítico Pediátrico se desarrolla desde 1987 junto a la Unidad de Cuidados Intensivos Pediátricos, hoy llamada Unidad de Paciente Crítico.
Desde sus inicios, nuestra unidad ha tenido como desafío estar a la vanguardia del tratamiento de los pacientes gravemente enfermos y promover la formación de profesionales en esta especialidad.
Su desarrollo a lo largo de los últimos años ha sido de un crecimiento vertiginoso, pasando desde 7 camas y 200 pacientes anuales, a 16 camas de paciente crítico y más de 800 pacientes al año desde 2013. A lo anterior se deben sumar desde enero de 2018, 12 camas adicionales de Cuidados Intermedios, convirtiéndose así, con estas 28 camas, en una de las Unidades más grandes y complejas de nuestro país.
Nuestra Unidad ha jugado un rol fundamental en el desarrollo de nuestra especialidad a nivel país, no sólo siendo pioneros en la introducción de nuevas técnicas de tratamiento (Ventilación de Alta Frecuencia Oscilatoria, Reemplazo Renal agudo, Óxido Nítrico Inhalado, ECMO) sino también por la capacitación de gran número de pediatras.
Es así que a partir de 1996 se dio inicio al primer programa de especialización en Cuidados Intensivos Pediátricos de nuestro país, programa de dos años, que ha formado a sub-especialistas que actualmente se desempeñan en Hospitales Públicos y Privados, tanto de Santiago como regiones.
A partir de año 2015 y dada la falencia de especialistas en cuidados intensivos pediátricos en nuestro país, creamos una nueva vía de ingreso a nuestro programa, que resultará en el entrenamiento de médicos especialistas en cuidados intensivos pediátricos en un lapso de cuatro años, lo que contribuirá a disminuir la brecha existente, manteniendo la calidad de su formación académica. De esta manera, nuestro programa tiene actualmente dos vías de ingreso, con un plan de formación de 4 años, para médicos no especialistas en Pediatría, junto al programa tradicional de 2 años para médicos ya pediatras.
Actualmente contamos con 6 académicos con formación Universitaria en Cuidados Intensivos Pediátricos, tanto en Chile como el extranjero y Residentes de Subespecialidad en los dos programas de formación.
Nuestro futuro como Unidad Académica y Clínica esta puesto en el desarrollo de proyectos de Investigación y mejoría clínica en todo el espectro de nuestra especialidad, poniendo énfasis el manejo de la falla respiratoria catastrófica, manejo de pacientes con trasplantes de órganos (hígado, riñón, corazón) y manejo del post operatorio de pacientes con cardiopatías congénitas, teniendo además la misión de mantener la excelencia en la formación de subespecialistas Medicina Intensiva Pediátrica y mantener el desarrollo de Curso de Educación Continua en nuestra especialidad.
En el Hospital Clínico UC se atiende adultos, niños y casos de traumatología, donde la atención de menores es realizada por médicos pediatras de la División de Pediatría UC.
Gracias al apoyo del Laboratorio y el Departamento de Radiología se pueden hacer variados exámenes, obteniéndose informes rápidos, lo que ayuda a hacer diagnósticos certeros en el momento que el paciente consulta, y tomar una decisión rápida sobre una posible hospitalización o aislamiento en caso de patologías infecciosas.
Entre los objetivos de la Unidad está consolidarse como grupo en atención de emergencia, desarrollar la subespecialidad y ser centro formador de futuros especialistas, siendo una de las máximas preocupaciones el perfeccionamiento y formación del personal dedicado exclusivamente a emergencia, reforzando la atención, docencia e investigación.
El número de atenciones que realiza es variable durante el día y las diferentes épocas del año, alcanzando el año 2000 a 22 mil 372 atenciones anuales en Pediatría, con un promedio de 61 niños diarios.
Durante periodos epidemiológicamente críticos, como los meses de invierno, cuando aparecen los brotes de virus influenza y sincicial respiratorio, el número de consultas aumenta bruscamente con el primero, y la proporción de pacientes menores y más graves con requerimientos de hospitalización con el segundo.
Con la ayuda de la Child Health Foundation, en 1995 se realizó el Proyecto de Perfeccionamiento en Emergencias y Cuidados Críticos Infantiles para médicos y enfermeras de los Servicios de Urgencia de hospitales de provincia.
En el campo de la investigación, la Unidad ha colaborado en el estudio de infecciones por Streptococcus pneumoniae en lactantes menores de dos años y en el proyecto de vigilancia de influenza y enfermedades respiratorias desde 1998. En el área académica, realiza docencia tanto de pre como de postgrado.
Desde 1997 el Departamento de Pediatría UC desarrolla la Unidad de Salud del Adolescente, para contribuir al conocimiento y mejoría de su nivel de salud a través de actividades clínicas, docentes, de investigación y extensión.
La Unidad está compuesta por un equipo interdisciplinario de profesionales académicos y acreditados (médicos pediatras, médicos familiares, ginecólogas, psiquiatras, nutriólogos, psicólogos, nutricionistas) que otorgan atención diferencial a adolescentes de 10 a 19 años con un enfoque biopsicosocial y familiar en diversos puntos de la Red de Salud UC-Christus, y trabaja en forma colaborativa en docencia e investigación con la Unidad de Salud de Adolescentes del Hospital Sótero del Río y Hospital La Florida.
En docencia se realiza capacitación en pre y postgrado y tutoría clínica directa a residentes de los Programas de Pediatría y Medicina Familiar. También se desarrolla el Programa de especialización de Medicina de Adolescentes, orientado a pediatras y médicos familiares. Además, al año 2017 se dicta por décimo séptimo año consecutivo el Diploma a distancia “Desarrollo y Salud Integral de adolescentes”, que acumula más de 1500 profesionales de salud capacitados de Chile y otros países de América Latina.
La Unidad de Adolescencia ha desarrollado varias líneas de investigación, como trastornos alimentarios, familia y adolescencia, enfermedades crónicas y transición del cuidado de adolescentes desde servicios pediátricos a adultos. Colabora con el Programa de Adolescencia del MINSAL en la formulación de lineamientos de atención y en la capacitación de los equipos de atención primaria a lo largo del país.
Como parte de las actividades de promoción de salud de adolescentes, el equipo de adolescencia cuenta con docentes acreditados por la Universidad de Iowa de EEUU y la Organización Panamericana de la Salud, como monitores de talleres de fortalecimiento familiar “Familias Fuertes”, realizando capacitación a profesionales a lo largo del país, como también a adolescentes y sus familias de distintos colegios de la Región Metropolitana.
La adolescencia se caracteriza por ser una etapa de grandes cambios físicos, psicológicos y sociales, que ocurren en corto tiempo. Es por esta razón que se le define como una etapa de alta vulnerabilidad, o de riesgo de incurrir en conductas dañinas para la salud como accidentes, violencia, consumo de alcohol y drogas, hábitos alimentarios inadecuados, embarazo e infecciones de transmisión sexual.
Es preocupante el aumento de los problemas de salud de adolescentes chilenos estos últimos años: el consumo de marihuana ha aumentado significativamente en la población de escolares (SENDA, 2016), a pesar de la evidencia científica clara que demuestra que esta sustancia produce daño cerebral y alteraciones cognitivas, entre otros daños a la salud, si se consume antes de los 18 años. Además, recientemente se ha reportado un aumento de la incidencia de infección por VIH, hepatitis A y gonorrea en adolescentes y jóvenes chilenos, secundario a una conducta sexual desprotegida (Laboratorio Referencia VIH. Instituto de Salud Pública. Chile. 2017) Estos son hábitos que se adquieren durante la adolescencia y determinan graves daños a la salud actual y futura. La obesidad y sus complicaciones metabólicas están aumentando entre los adolescentes chilenos, y también están en aumento los trastornos alimentarios como la anorexia nerviosa y bulimia, y aparecen cada vez a menor edad.
La adolescencia es también una época de grandes oportunidades de establecer hábitos y estilos de vida saludable, determinante para el logro de una adultez sana.
La Unidad está compuesta por un equipo interdisciplinario de profesionales académicos y acreditados (médicos pediatras, médicos familiares, ginecólogas, psiquiatras, nutriólogos, psicólogos, nutricionistas) que otorgan atención diferencial a adolescentes de 10 a 19 años con un enfoque biopsicosocial y familiar en diversos puntos de la Red de Salud UC-Christus, y trabaja en forma colaborativa en docencia e investigación con la Unidad de Salud de Adolescentes del Hospital Sótero del Río y Hospital La Florida.
En docencia se realiza capacitación en pre y postgrado y tutoría clínica directa a residentes de los Programas de Pediatría y Medicina Familiar. También se desarrolla el Programa de especialización de Medicina de Adolescentes, orientado a pediatras y médicos familiares. Además, al año 2017 se dicta por décimo séptimo año consecutivo el Diploma a distancia “Desarrollo y Salud Integral de adolescentes”, que acumula más de 1500 profesionales de salud capacitados de Chile y otros países de América Latina.
La Unidad de Adolescencia ha desarrollado varias líneas de investigación, como trastornos alimentarios, familia y adolescencia, enfermedades crónicas y transición del cuidado de adolescentes desde servicios pediátricos a adultos. Colabora con el Programa de Adolescencia del MINSAL en la formulación de lineamientos de atención y en la capacitación de los equipos de atención primaria a lo largo del país.
Como parte de las actividades de promoción de salud de adolescentes, el equipo de adolescencia cuenta con docentes acreditados por la Universidad de Iowa de EEUU y la Organización Panamericana de la Salud, como monitores de talleres de fortalecimiento familiar “Familias Fuertes”, realizando capacitación a profesionales a lo largo del país, como también a adolescentes y sus familias de distintos colegios de la Región Metropolitana.
La adolescencia se caracteriza por ser una etapa de grandes cambios físicos, psicológicos y sociales, que ocurren en corto tiempo. Es por esta razón que se le define como una etapa de alta vulnerabilidad, o de riesgo de incurrir en conductas dañinas para la salud como accidentes, violencia, consumo de alcohol y drogas, hábitos alimentarios inadecuados, embarazo e infecciones de transmisión sexual.
Es preocupante el aumento de los problemas de salud de adolescentes chilenos estos últimos años: el consumo de marihuana ha aumentado significativamente en la población de escolares (SENDA, 2016), a pesar de la evidencia científica clara que demuestra que esta sustancia produce daño cerebral y alteraciones cognitivas, entre otros daños a la salud, si se consume antes de los 18 años. Además, recientemente se ha reportado un aumento de la incidencia de infección por VIH, hepatitis A y gonorrea en adolescentes y jóvenes chilenos, secundario a una conducta sexual desprotegida (Laboratorio Referencia VIH. Instituto de Salud Pública. Chile. 2017) Estos son hábitos que se adquieren durante la adolescencia y determinan graves daños a la salud actual y futura. La obesidad y sus complicaciones metabólicas están aumentando entre los adolescentes chilenos, y también están en aumento los trastornos alimentarios como la anorexia nerviosa y bulimia, y aparecen cada vez a menor edad.
La adolescencia es también una época de grandes oportunidades de establecer hábitos y estilos de vida saludable, determinante para el logro de una adultez sana.
A pesar del cambio de hábitos, la mayor parte de los adolescentes chilenos son sanos, y es este desarrollo saludable el que se debe promover. Ello implica reenfocar la atención en la promoción, reducción de riesgos y fomento de factores protectores. Abrir espacios de intervención preventiva y clínica de calidad, que contemplen las necesidades específicas de este grupo etario.
Esto supone un cambio de paradigma en salud que incluya un nuevo foco: desde lo biológico a lo psicosocial, desde los problemas específicos a una visión holística, desde un enfoque individual a uno familiar, desde el énfasis en lo terapéutico a lo preventivo, desde las intervenciones aisladas a las combinadas.
Con este propósito desde 1997 el Departamento de Pediatría UC desarrolla el Programa de Salud del Adolescente, para contribuir al conocimiento y mejoría de su nivel de salud a través de actividades clínicas, docentes, de investigación y extensión.