Medicina Familiar
Las infecciones parasitarias constituyen un problema de salud pública, que es más prevalente en países de bajos ingresos y en los cuales la migración desde esos países es muy importante. En este artículo revisaremos las principales medidas farmacológicas y no farmacológicas de su manejo.
Mayo 2021
INTRODUCCIÓN
Las infecciones parasitarias constituyen un problema de salud pública, sobre todo en países subdesarrollados, y en aquellos desarrollados pero con una importante migración, afectando mayormente a la población pediátrica1,2.
Existen parásitos comensales y otros que son patógenos. Diferenciarlos es claro para poder definir a quienes tratar y a quienes no hacerlo. La tabla 1 resume el listado de parásitos comensales aislados con mayor frecuencia en el mundo.
Tabla 1: Parásitos comensales aislados con mayor frecuencia2:
Helmintos (nemátodos) |
Protozoos |
Capillaria hepatica, Dioctophyma renale, Dipetalonema perstans, Dipetalonema streptocerca, Mansonella ozzardi, Syngamus laryngeus, Ternides deminutus |
Chilomastix mesnli, Enteromonas hominis, Retortamonas intestinalis, Trichomonas hominis, Trichomonas tenax, Endolinax nana, Entamoeba coli, Entamoeba gingivalis, Entamoeba hartmani, Entamoeba polecki, Lodamoeba buetschlii |
Los enteroparásitos patógenos más frecuentemente encontrados en Chile son: Blastocystis Hominis, Giardia Lamblia y Enterobius Vermicularis3,4,5.
Actualizaremos las recomendaciones específicas de tratamiento para cada uno de ellos.
I. OXIURIASIS: ENTEROBIUS VERMICULARIS
Medidas Generales de tratamiento 6,7:
Manejo farmacológico:
Una revisión literaria (2019) propone como primera línea de manejo el mebendazol en dosis 100 – 200 mg una sola dosis, lo que logra una tasa de erradicación sobre 90%.
Esquema: día 1, repetir al día 15 y luego al día 286. Otras revisiones proponen un esquema de día 1 y luego repetir día 151. Siempre se debe tratar a toda la familia, dado el alto nivel de contagio intrafamiliar.
II. BLASTOCISTIASIS: BLASTOCYSTIS HOMINIS (B. HOMINIS)
No existen grandes estudios o revisiones sistemáticas que evalúen la efectividad del tratamiento de este parásito. Pese a que existen reportes de que podría ser un cuadro autolimitado, es de consenso, que es un parásito patógeno, que genera daño tisular y que por lo tanto, debe ser tratado 8.
Manejo farmacológico:
La primera línea de tratamiento es metronidazol, con lo cual se logra una remisión clínica de 88% y remisión parasitaria (heces) de un 80% a los 6 meses8.
Esquema: dosis variables que van desde 15 a 50 mg/kg/día dividido en tres dosis, por 10 días1,8.
III. GIARDIASIS: GIARDIA LAMBLIA
Una revisión sistemática (2012) de buena calidad metodológica, que incluyó 1.817 pacientes (1.441 eran menores de 18 años), comparó la efectividad de Mebendazol (15-20 mg/kg/día dividido en 3 dosis por 5 días) versus Tinidazol (50-75 mg/kg/día en dosis única). La revisión reporta con una certeza de evidencia muy baja, que no existen diferencias estadísticamente significativas en la cura parasitológica, mejoría clínica, ni en el reporte de efectos adversos entre ambos medicamentos 9.
Otra revisión sistemática (2018) que incluyó tanto adultos como niños, mostró que el tinidazol tendría mayor efectividad que el metronidazol en la erradicación parasitaria (RR 1.23 (1.12-1.35))10.
En resumen, Tinidazol podría ser una mejor alternativa de manejo de Giardiasis, por su mayor efectividad, costo similar (o incluso menor ) y ser de dosis única.
¿CUAL ES EL ROL DE LOS PROBIÖTICOS EN EL MANEJO DE LAS PARASITOSIS?
Si bien la evidencia que existe es escasa, algunos estudios muestran que los probióticos podrían funcionar como coadyuvantes en el tratamiento farmacológico de las infecciones por protozoos.
Un estudio randomizado, que incluyó población adulta (2006), mostró que Saccharomyces Boulardii (250 mg cada 12 hrs por 10 días) en combinación con metronidazol en el tratamiento de giardiasis, podría ser más efectivo para disminuir la carga parasitaria que el uso aislado de metronidazol11.
Otro estudio randomizado en niños (2011), de buena calidad metodológica, comparó el uso de Saccharomyces Boulardii en combinación con metronidazol para el tratamiento de Blasctocystis Hominis. El estudio reportó que no había diferencias significativas en la resolución de síntomas ni en la erradicación parasitaria al comparar ambos esquemas 12.
Una revisión sistemática (2013) de buena calidad metodológica, que incluyó 464 pacientes pediátricos con síndrome diarreico prolongado de causa infecciosa (entre ellas Giardia Lamblia y Entamoeba Histolytica), comparó el uso de probióticos versus placebo en la duración del cuadro diarreico. El estudio reportó mostró que los probióticos (Lactobacillus Rhamnosus GG, Lactobacillus casei, Lactobacillus acidophilus y Saccharomyces boulardii) serían efectivos para disminuir en 3 a 4 días el tiempo de diarrea de causa infecciosa, incluyendo causas parasitarias, con moderada certeza de evidencia 13.
EN RESUMEN
Las infecciones parasitarias intestinales son una entidad que no debemos descuidar en contextos de atención primaria en Chile, principalmente en población pediátrica.
Los enteroparásitos patógenos más prevalentes en nuestro país son: Blastocystis Hominis, Giardia Lamblia y Enterobius Vermiculares. Estos deben ser erradicados, y elegirse el esquema de tratamiento más adecuado al parásito, tanto a nivel farmacológico como no farmacológico.
El uso de probióticos puede ser una alternativa de manejo coadyuvante al antiparasitario en infecciones por protozoos.