UC acoge seminario sobre recién nacido prematuro
Fecha: 18 de noviembre 2015
La actividad pretende entregar contenidos específicos que puedan potenciar el proceso de evaluación e intervención terapéutica en los recién nacidos prematuros. Esto incluye identificar el contexto físico que rodea al recién nacido prematuro en la unidad de neonatología y comprender el trabajo interdisciplinario de la unidad. Además se busca que los participantes logren observar e identificar procedimientos específicos de evaluación fonoaudiológica de la deglución y adquirir conocimientos teóricos sobre un plan modelo de intervención a partir de la observación de casos.
En las últimas décadas han existido cambios importantes en los indicadores biodemográficos. A nivel mundial la incidencia de parto prematuro es cercana al 10%. En nuestro país la prematurez es la causa más importante de morbimortalidad perinatal en relación al peso y edad gestacional. En Chile, la sobrevida para los niños entre 1.000 y 1.499 grs. es del 77,1%, mientras que para recién nacidos entre 500 y 900 grs. es sólo del 34,4%.
Las complicaciones de los prematuros aumentan mientras menor es su edad gestacional o peso de nacimiento, presentando desde complicaciones leves, como Apneas, hasta enfermedades graves como Hiperbilirrubinemia, Enfermedad de la Membrana Hialina, Hemorragia Intraventricular, Leucomalacia Periventricular, Sepsis, Enterocolitis Necrotizante, y por cierto, secuelas neurológicas. El 50% de las alteraciones neurológicas de la infancia son atribuibles a un parto prematuro, las que incluyen desde dificultades leves en las funciones cognitivas hasta parálisis cerebral.
A nivel internacional se estima entre el 25 y el 40% la incidencia de trastornos de alimentación y deglución en la población pediátrica normal. En niños con algún trastorno del desarrollo, la incidencia oscila entre el 33 y el 80%. En Estados Unidos los recién nacidos prematuros son poco más del 12% de la RN vivos. Desde 1987 al 2000 la sobrevida de los recién nacidos de extremo bajo peso se incrementó de 65 al 90%. La sobrevida de los recién nacidos menores de 600 gramos aumento de 30 a 55 %.
En Chile la incidencia de nacimientos menores a las 37 semanas de gestación asciende al 7,2% y a un 1,18% los nacimientos de niños prematuros extremos (INE, 2010). Con base en lo anterior se puede predecir con mucha seguridad que un recién nacido prematuro tendrá altas probabilidades de presentar dificultades para alimentarse, tanto por inmadurez en el desarrollo reflejo, como por la comorbilidad mencionada. Esta manifestación de inmadurez de algunas funciones se puede ver agravada producto de enfermedades respiratorias, neurológicas o digestivas. Por la importancia en el largo plazo que tiene la ganancia de peso en un recién nacido, es muy importante conocer lo que se debe evaluar y comprender de qué manera es posible realizar la intervención terapéutica.
En este contexto, el propósito del seminario es que distintos profesionales perfeccionen su quehacer, fundamentalmente en la evaluación e intervención de los trastornos de la deglución que pueden presentar estos recién nacidos prematuros y en la medida de lo posible, disminuir el impacto y las consecuencias negativas propias de su condición en el largo plazo. Nuevos enfoques en el abordaje de la comorbilidad de esta población son necesarios, tanto en la atención inmediata como a largo plazo. En este contexto, una mirada basada en la Neurorehabilitación y en la atención de sus dificultades, desde equipos profesionales capacitados, es una urgencia que debe ser progresivamente resuelta.
Detalles en el siguiente enlace: http://bit.ly/1MBscz1
