Postgrado de Escuela de Medicina UC cuenta con nuevos cursos transversales en modalidad B-learning
Fecha: 18 de noviembre 2015
Los cursos transversales son parte de la malla obligatoria a desarrollar por los alumnos en su formación de postgrado en la Pontificia Universidad Católica de Chile. Esto permite que los estudiantes tengan otras visiones y puntos de vista, más allá de su área de especialización.
La Facultad de Medicina ha iniciado un proceso de cambios que contempló en una primera etapa el desarrollo de una nueva malla curricular para el pregrado, y en paralelo, una revisión de los programas académicos de postgrado, incorporando una variedad de cursos para el desarrollo alumno-docente. La Dirección de Postgrado de la Escuela de Medicina UC busca resolver la necesidad de especialización, incorporando nuevas herramientas para insertar otras competencias y roles al proceso de formación médica.
“El desarrollo profesional es mucho más que ser un médico experto. Nosotros queremos ser una universidad que lidere estos aspectos, para eso tenemos que abrirnos a otros aspectos, el desarrollo profesional implica el desarrollo de otras competencias y habilidades”, explica el Dr. Matías González, subdirector de la Dirección de Postgrado de Medicina UC.
La universidad seleccionó al Royal College of Physicians and Surgeons de Canadá, por su alto prestigio y alta coincidencia con los objetivos de la Facultad de Medicina UC. Ellos están realizando todo un proceso de acreditación internacional de los programas de especialidades médicas, lo que hizo atractivo seguir su modelo de enseñanza basado en competencias.
“Y en paralelo pensamos que es una muy buena forma también de dialogar entre ambas organizaciones y que los cursos transversales sean uno de los vehículos por el que nosotros podamos desplegar la enseñanza de las nuevas competencias en los residentes”, comentó el Dr. González.
Los primeros dos cursos transversales en formato b-learning se insertan en la malla que ya dispone Postgrado. Prontamente se irán generando nuevos contenidos. “Queremos hacer una transición a que la mayoría de los cursos apunten a las competencias que nosotros estamos buscando reforzar”, enfatizó el Dr. González.
El subdirector de postgrado de la Escuela de Medicina UC también comenta que se han diseñado programas atractivos en esta línea y algunos con una segunda característica. “Que sean una aplicación real para una población muy compleja tanto de profesores como de alumnos”, comentó. Además agrega que se cuenta con el aporte invaluable de un grupo de profesionales liderados por el psicólogo José Pinedo, que está desarrollando todas las herramientas, piezas gráficas, audiovisuales, modalidad de tutoriales para que los alumnos puedan trabajar en modalidad B-learning.
A este grupo se suman las alumnas en práctica de la Escuela de Psicología UC, las que apuntan a generar espacios de interacción multidisciplinaria. “Tenemos mucho que aprender en conjunto, nos parece de toda aplicación a nuestra realidad y es una forma de ir insertando el intercambio entre distintas facultades de nuestra universidad”, explica el Dr. Matías González.
Modalidad B-learning
En la última encuesta del Ministerio de Educación, en Educación Superior, se muestra que las modalidades elearning y blearning han aumentado en más del 85% en cantidad de alumnos desde el año 2011. Esto refuerza la idea de que los cursos transversales que impartirá la dirección de postgrado en los programas de especialidades médicas en modalidad semipresenciales son una buena oportunidad para abrir nuevas instancias académicas.
Existe un diseño previo de las competencias CANMEDs, donde está el médico experto al centro, y seis roles o competencias transversales que aportan en la formación de todas las especialidades. “Tienen un diseño para cada uno de los roles, lo que nosotros hemos hecho es adaptar las sugerencias de cada uno a la realidad de la escuela de medicina”, señaló José Pinedo, psicólogo de la Facultad de Medicina UC, coordinador de este proyecto.
El profesor Pinedo explica que se realiza un diseño instruccional que da cuenta de los objetivos propuestos ahí, y los contenidos que es importante que los estudiantes conozcan, se implementan en modalidad B-Learning. De forma semipresencial, con 10 sesiones de las que 3 son presenciales y las otras virtuales se espera el desarrollo de ciertas competencias, conocimientos, habilidades y actitudes que complementan la formación profesional.
“Todo lo que es conocimiento y contenido es a través de una plataforma de la universidad, y lo que nosotros hacemos, además del método instruccional es el diseño de medios. En este caso es todo a través de la plataforma virtual con profesores frente a cámara con la clase grabada, presente todo el tiempo en pantalla y al costado las láminas de power point, como si le estuviera haciendo la clase presencialmente a los estudiantes”, comenta José Pinedo.
Como la idea es que haya aprendizaje observacional, que no se puede ver en las siete sesiones a distancia, se utilizan videos y medios audiovisuales de apoyo, tomados del cine, de series de televisión, cápsulas de video que están insertadas en clases de una hora.
Los videos son cápsulas de 3 a 4 minutos, y los estudiantes tienen que poner en práctica los contenidos, haciendo un análisis para las tareas semanales. De esa manera hacemos rápidamente una transferencia lo más cercana posible a la realidad de ellos, en función del conocimientos, las habilidades y actitudes que ellos mismos desarrollan. Tienen una clase semanal con una lectura de apoyo. Como es a distancia hay todo un sistema tutorial que reemplaza el rol académico del profesor por el de tutor.