Investigadora de Salud Pública expone en Curso Pre-Congreso sobre Enfermedad de Chagas
Fecha: 25 de septiembre 2014
La doctora Marisa Torres es parasitóloga, académica del Departamento de Salud Pública UC, quien ha sido invitada a diversas instancias nacionales y extranjeras para exponer y debatir sobre la Enfermedad de Chagas, entre ellas su participación en la generación de la norma de este patología en Chile, así también como docente en el Curso Pre-Congreso Latinoamericano de Parasitología el año pasado y el Congreso Mundial de la disciplina en México durante el 2014.
“Somos muy pocos especialistas y sólo dos o tres hemos representado al país en instancia de discusión internacional sobre estas materias”, señala la Dra. Torres.
La doctora ha revisado evidencia científica nacional para realizar estudios que focalicen el control de este tipo de patologías infecciosas, incluyendo la detección de la enfermedad en bancos de sangre, esa fue la experiencia que expuso el pasado 10 de agosto en Ciudad de México.
La doctora Torres inicia su presentación con una pregunta ¿Cuáles son los desafíos para el control adecuado de la enfermedad de Chagas en los bancos de sangre? Ella identifica algunos factores que caracterizan este problema: 1. Donación de sangre, 2. Valorar la aportación de la vigilancia epidemiológica, 3. Identificar los hitos importantes en el control de experimentos.
“Se sabe que desde 1952 la transmisión de transfusión de T. cruzi y es el segundo mecanismo de transmisión más importante después del vector”, introduce la Dra. Torres en su resumen ejecutivo. Para la experta, esta transmisión que puede llegar a sobrevivir en Banco de Sangre de 18 a 21 días, se ha intensificado con la migración rural-urbana de infectados. Estrategias de control eficaces han sido como la selección de donantes (pre-donación de encuestas serológicas y exámenes). La vigilancia epidemiológica en los bancos de sangre es un proceso regular y continuo que monitorea el comportamiento del fenómeno: magnitud, tendencias, características, para generar políticas sostenibles, la evaluación del impacto de las medidas de prevención.
Otro tema importante para la parasitóloga es informar al donante infectado, ofrecer apoyo, incluso emocional, promover el autocuidado, promover la adherencia a los controles de tratamiento e informar de la responsabilidad en la transmisión de enfermedades.
En el año 2007 la Organización Panamericana de la Salud (OPS) y la Organización Mundial de la Salud hicieron una llamado de atención sobre la expansión de la Enfermedad de Chagas en el mundo, más allá de los límites endémicos tradicionales. En 2010 este organismo la declaró una de las 17 enfermedades tropicales olvidadas en la Región de las Américas.
En 1999 Chile recibió la certificación oficial de la OPS/OMS alcanzando la meta de interrupción de la transmisión vectorial de esta enfermedad, sin embargo aún se mantiene el desafío de implementar políticas de atención integrada a las personas infectadas con T. Cruzi y de control de transmisión vertical de la patología, logrando mantener el control para disminuir significativamente la Enfermedad de Chagas como problema de salud pública en el país.
La Enfermedad es descubierta por el médico brasileño Carlos Chagas en 1909, causada por el parásito denominado T. Cruzi. Él describe su presencia simultáneamente en la sangre de los infectados y en las deposiciones del vector Triatoma Infestans. Puede evolucionar de la forma aguda a la crónica, provocando graves daños en los sistemas cardiovasculares y digestivos. Se trata de una patología emergente a nivel mundial, que de no ser tratada, permanece por toda la vida con un potencial riesgo vital debido a sus complicaciones. En cambio al ser abordada integralmente, con estrategias efectivas de prevención y control, con participación mancomunada y sistemática de actores sociales claves, se podrían obtener exitosos resultados.