Dr. Marco Arrese participa en guías internacionales para la práctica clínica de enfermedades del hígado
Fecha: 21 de julio 2015
El Dr. Marco Arrese, jefe del Departamento de Gastroenterología tuvo una destacada participación como delegado de la Asociación Latinoamericana para el estudio del Hígado (ALEH) en la redacción de las Guías de práctica clínica para la evaluación de la severidad y el pronóstico de enfermedades hepáticas. El reporte final fue publicado en la revista Journal of Hepatology (Impact Fator 11,336).
La publicación, que también se encuentra en versión on line, es una orientación para los médicos que evalúan la severidad y pronóstico del daño hepático, con algunos marcadores sanguíneos y con la incorporación de nuevas tecnologías sanitarias para la medición y diagnóstico de estas patologías.
Recordemos que la Universidad Católica cuenta con tecnología de última generación, como el Fibroscan –único en Chile- una de las herramientas más validadas para detectar la magnitud del daño hepático y así hacer más eficiente el tratamiento. Posteriormente se adquirieron otras herramientas como el ARFI y el FFI, que permiten identificar el grado de severidad de estas enfermedades y que pueden ser usados cada uno o de forma complementaria.
Como relata en su introducción el artículo: La fibrosis hepática es parte de las alteraciones estructurales y funcionales en la mayoría de las enfermedades crónicas del hígado. Es uno de los principales factores pronósticos como la cantidad de fibrosis se correlaciona con el riesgo de desarrollar cirrosis y las complicaciones relacionadas con el hígado en viral y no viral enfermedades crónicas del hígado [1,2]. La biopsia hepática ha sido tradicionalmente considerada el método de referencia para la evaluación de tejido, daños tales como la fibrosis hepática en pacientes con enfermedad hepática crónica.
“La biopsia hepática sigue siendo un procedimiento costoso e invasivo que requiere de los médicos y patólogos suficientemente entrenados para obtener resultados adecuados y representativos. Esto limita de nuevo el uso de la biopsia hepática para la detección de masas. Es un procedimiento invasivo, que impliquen un riesgo y complicaciones de raras pero potencialmente mortales. Estas limitaciones han conducido al desarrollo de métodos no-invasivos para la evaluación de la fibrosis hepática. Aunque algunos de ellos son de uso común en los pacientes de primera línea evaluación, la biopsia se mantiene dentro del arsenal de los hepatólogos a la hora de evaluar la etiología de las enfermedades complejas o cuando existen discordancias entre los síntomas clínicos y el grado de fibrosis evaluada por métodos no invasivos”, señala la publicación.