Dr. Hernán Ramírez escribe sobre Historia de la Odontología
Fecha: 27 de mayo 2015
Desde la cultura mesopotámica, hasta los primeros cirujanos dentistas que comenzaron a utilizar anestesia, y a considerar la higiene bucal como medida de prevención. Desde los primeros jeroglíficos en Egipto hasta el dominio español en América y la influencia en la cultura precolombina con la evangelización cristiana y los primeros médicos sacerdotes.
El Dr. Hernán Ramírez Skinner, cirujano dentista especialista en cirugía maxilofacial y manejo del dolor, Profesor Asociado de la División de Cirugía, integrante del Programa de Estudios Humanísticos y académico de la carrera de Odontología de la Facultad de Medicina UC, ha recopilado en la publicación “Historia General de la Odontología, el arte dental como acto médico”, uno de los más completos textos del origen de la medicina dental, que según reconoce, “estaba disuelta en un quehacer unificado donde el práctico del arte elige lo apropiado a la naturaleza del paciente, atendiendo por igual el alma y el cuerpo”, señala en el libro.
Para el especialista, muchos médicos antiguos practicaron el arte dental y todos los cirujanos también lo hicieron, así como farmacéuticos y barberos. Pero lo que destaca es el derecho ineludible del ciudadano a una salud integral.
El autor apela a la optimización de los planes de formación universitaria, tal como ya está ocurriendo en países desarrollados, “programas académicos que faciliten la transversalidad de la educación médica”, añade en sus palabras preliminares.
Pero también advierte sobre las falencias de la odontología en nuestro país. “En Chile, hasta hoy no hay una entidad acreditadora de los programas de post grado que certifican especialidades odontológicas. Este es un ejemplo de la necesidad que tiene el gremio de actualizar sus modelos de educación. La profesión del cirujano dentista chileno está en crisis de identidad y yo sostengo que esto se debe a una mala formación en las bases bio-médicas de la profesión. Recordemos que la definición está dada por el acto médico, el cual ha sido siempre la razón de ser del ejercicio. Muchos somos hoy los convencidos del enorme beneficio que le trae a la práctica de la estomatología una formación médica amplia. En efecto, los dentistas somos mejores cuando recibimos una educación suficiente en materia médica ajustada específicamente para las particulares necesidades de nuestro ejercicio”, afirmó.
Para el académico este libro es un llamado a despertar para asumir la identidad profesional, para enmendar los procesos de aprendizaje que nos han desvalorizado y para iniciar una nueva tarea, integrar en propiedad el equipo de salud y liderarlo en materia estomatológica. “Estuve cinco años leyendo, resumiendo, entendiendo y escribiendo este mensaje para las autoridades académicas, líderes y entidades acreditadoras. Pude reflexionar sobre nuestras funciones en un hospital universitario moderno y sobre la responsabilidad que tenemos con los pacientes”, señaló en la publicación.
