Consejos para que el agua y la comida no estropeen tu viaje
Fecha: 17 de febrero 2016
“Cuidado con beber agua de la llave o no vayas a comer cualquier cosa”, son los típicos consejos que se suelen escuchar a la hora de emprender una aventura a otra ciudad o país. Pero, ¿cuál es el sustento de estas afirmaciones? Conversamos con Fernanda Chandía, docente de la carrera de Nutrición y Dietética de la UC.
-Hoy a la hora de viajar muchas personas deciden no tomar agua de la llave por considerarla poco potable, ¿es en realidad cierto esto?
Si el viaje se realiza dentro del territorio nacional, en la gran mayoría de las comunas de Chile no existiría inconvenientes en consumir agua de la llave.
La Superintendencia de Servicios Sanitarios, es la entidad que vela el cumplimiento de la normativa NCh409, la cual establece los requisitos de calidad que debe cumplir el agua potable a lo largo de todo el país. Un reciente informe referido al cumplimiento de la norma de calidad del agua, arrojó que en 14 comunas del país existe presencia de minerales y/o microorganismos que presentan un riesgo para la salud. Entre las comunas se encuentran: Alto Hospicio, Antofagasta, Copiapó, Caldera, Tierra Amarilla, Chañaral, Diego de Almagro, Pichidangui, Licantén, Maule, Aysén, Florida, Lo Barnechea y Pudahuel. Solo en el caso de estas comunas, se recomienda el consumo de agua embotellada.
Si el viaje es fuera del territorio nacional, también se recomienda el consumo de agua embotellada, ya que la calidad del agua potable de otros países es normada de manera diferente a Chile, permitiendo distinto tipo y cantidad de material biológico, lo cual puede afectar el funcionamiento normal de la flora intestinal de nuestro organismo, provocando en algunos casos, malestares gastrointestinales.
-¿Es mejor tomar agua embotellada o utilizar por ejemplo pastillas para descontaminar el agua?
Es recomendable preferir agua embotellada, la cual para poder ser vendida debe cumplir con una Normativa de Calidad. Las pastillas purificadoras de agua se utilizan principalmente en casos de emergencia, cuando no se cuenta con otra fuente de agua disponible para el consumo humano, por lo que se recurre a aguas en riachuelos, lagunas, cascadas u otros, desconociendo su procedencia y contenido biológico.
-Al viajar las personas suelen cambiar su dieta y ello puede causar malestares estomacales. ¿Cuáles son las principales recomendaciones que las personas deben seguir para prevenir?
Independiente del lugar de destino, se recomienda que las personas consuman y/o adquieran alimentos desde lugares autorizados para su preparación, manipulación y venta. Es importante destacar que en Chile se ha popularizado la instalación de carritos de comida; en algunos casos éstos cuentan con resolución sanitaria para la preparación y venta de alimentos, sin embargo hay que fijarse porque no todos cuentan con esta autorización. En el extranjero se recomienda la compra y/o consumo de alimentos en lugares establecidos para esto. Además, es importante indicar que aquellos alimentos como pescados, mariscos, carnes y huevos se deben consumir totalmente cocidos.
-¿Qué tipo de alimentos se deben evitar al viajar?
Independiente de que sea un viaje en territorio nacional o en el extranjero, si el viaje considera varias horas en avión, auto, bus o tren, nuestro organismo experimenta cambios en su funcionamiento normal, debido principalmente a la falta de movimiento. Es así que se recomienda evitar la ingesta de comidas altas en grasas, condimentos irritantes y meteorizantes. Por otro lado, para evitar la retención de líquidos en las extremidades, se recomienda mantener una adecuada hidratación mediante la ingesta de agua sin gas o infusiones, sin la adición de azúcar, además de evitar alimentos con alto contenido de sal. Asimismo, se recomienda que de vez en cuando los pasajeros puedan moverse.
-Al volver nuevamente a Chile, ¿cómo se debería retomar nuevamente la dieta propia del país?
Por lo general, el período de vacaciones es un tiempo de relajo en el cual no existen cargas laborales ni académicas, por lo cual muchos hábitos se ven trastocados. La alimentación habitual sufre variaciones, generalmente aumentando la cantidad de alimentos consumidos, perdiendo los horarios establecidos para los tiempos de comida, y prefiriendo, en ocasiones, el consumo de alimentos altos en grasas y azúcares. Lo anterior se manifiesta en un aumento del peso corporal. Es por esto que se recomienda que al volver de vacaciones se retome una alimentación balanceada, seleccionando el tipo, cantidad de alimentos, y estableciendo horarios de comidas.