Camila es la alumna que ingresa a Medicina con el máximo puntaje
Fecha: 20 de febrero 2015
Camila Vargas Muñoz salió del Colegio Sagrados Corazones de Alameda y al rendir la Prueba de Selección Universitaria (PSU) obtuvo doble puntaje nacional en Matemáticas y Ciencias, ponderó 836,8 y tenía un NEM de 6.97, lo que le permitía entrar a la carrera: ella escogió Medicina en la UC.
De pequeña siempre quiso ser médico, y como ella cuenta desde chica tenía estos típicos juegos de doctores, siempre le gustó mucho. “De más grande comencé a averiguar y siempre quise que quería estudiar acá. Como en séptimo y octavo ya estaba estudiando mentalizada que tenía que tener buenas notas porque influyen bastante, sobretodo últimamente, y mis compañeros me apoyaban diciéndome nada, tú ya estás lista, para después con la prueba y todo lograr estudiar acá”, cuenta.
La joven de 18 años es la mayor de tres hermanos, vive en Las Condes, y su familia siempre la apoyó. “Eso me ayudó mucho para seguir adelante con lo que quería, tenía en mi mente todo listo para poder llegar a este momento” relata mientras se matriculaba en la Dirección de Pregrado de la Escuela de Medicina, donde fue recibida por el Decano de la Facultad, Dr. Luis Ibáñez, el Director de Escuela de Medicina, Dr. Klaus Püschel y la subdirectora de pregrado, Dra. Solange Rivera.
No se imaginó que sería recibida por ellos y menos que le regalarían un libro con la historia de la Escuela de Medicina UC. “Fue emocionante, no me lo esperaba, yo creí que llegaría acá, me pasarían unos papeles y listo. Quedé bastante contenta”, añadió.
Desde pequeña prestaba mucha atención en clases y después no le era muy difícil aprender en su casa. “Iba como repasando, y después mis compañeros me pedían que los ayudara con algunas cosas entonces repetía la misma idea, y eso me fue ayudando para aprender tanto, tener buena memoria y después el último año tuve clases particulares, repasaba, hice preuniversitario, me preparé”.
Al lograr lo que se había propuesto, Camila nos cuenta que ahora quiere comenzar a disfrutarlo. “Porque una cosa es entrar, otra es continuar y mantenerse”, señaló.
Con respecto a sus nuevos compañeros y para las futuras generaciones su mensaje sería que si tienen claro lo que quieren, tienen que trabajar y luchar por eso. “Nadie les puede decir que no es para ellos, tienen que hacer todo lo posible para lograrlo y si se puede”, reflexionó.
Y con respecto a sus futuros profesores espera aprender harto y tener cercanía con ellos. “Sobre todo si uno les pregunta cosas, que siempre estén dispuestos a trabajar con nosotros sus alumnos”, finalizó.