Aprendiendo a fortalecer los hábitos de estudio de los más pequeños
Fecha: 3 de marzo 2016
Para la mayoría de los niños y sus familias la campana para entrar a clases ya sonó, y también con ello comenzó la ansiedad por lo que conllevan las responsabilidades escolares. ¿Cómo hablarles a los más pequeños sobre lo importante que es estudiar todos los días y ser sistemáticos? Montserrat Sepúlveda, Psicopedagoga de la División de Pediatría de la Facultad de Medicina de la Universidad Católica de Chile profundiza en ello.
Actualmente la autonomía en los niños es un requisito fundamental para desenvolverse en el colegio. “Siendo precisamente los padres quienes tienen como una de sus principales responsabilidades entregar herramientas a sus hijos para fortalecer ello”, agrega Montserrat Sepúlveda, de Medicina UC.
La jornada escolar en la mayoría de los colegios es extensa, los niños además llevan tareas a la casa, deben preparar pruebas, trabajos y en la mayoría de los casos, no cuenta con la supervisión de sus padres, ya que se encuentran en el trabajo. De acuerdo a la experta, en general, para resolver esto los padres suelen tomas dos caminos. “El primero tiene que ver con entregar a los hijos herramientas de estudio y organización desde que son pequeños, incluyendo horarios, rutinas e implantando la responsabilidad, lo que les permitirá a futuro a los pequeños ser personas desenvueltas y seguras de sí mismas. Otra alternativa es que al llegar a casa, los padres hagan las tareas con sus hijos, estudien con ellos, lean con ellos y piensen con ellos. Aquí es donde hay que tener ojo. Muchos padres en consulta me dicen que estudian mucho para las pruebas con sus hijos y que los resultados que obtienen no son el reflejo de su esfuerzo, y esto es obvio, pues no les enseñan a pensar por sí solos”, agrega la especialista.
Entendiendo esto, es fundamental que los padres comprendan que a los niños desde muy pequeños se les deben inculcar herramientas de estudio, organización, se les debe enseñar a pensar, a sentir curiosidad, a descubrir el mundo, buscar materiales por su propia cuenta y ser autónomos. “Se debe inculcar la responsabilidad como una gran y cotizada cualidad, que les traerá mucha alegría y reconocimiento. Una buena idea, por ejemplo, es que los padres les organicen a sus hijos las tardes, para que al llegar del trabajo sólo supervisen”, explica Montserrat Sepúlveda.
En esta etapa de organización, además, el refuerzo positivo será un gran aliado. “Así, fijar una meta y tarea por semana para tener una recompensa el fin de semana para los niños será una gran motivación. Es necesario destacar que la motivación es algo sencillo como invitar un amiguito el día sábado a la casa, ir de picnic, ir al cerro a andar en bicicleta, por ejemplo”, señala la psicopedagoga de la UC.
“Finalmente, el rol de los padres es ser guías, entregar herramientas a los niños, formar y no deformar o facilitar, pues en el futuro los niños serás los más beneficiados y felices con el educación y formación que recibieron de parte de sus padres”, agrega Montserrat Sepúlveda.
Alternativa de organización durante la tarde:
1.Iniciar con 35 minutos de descanso para cuando el niño llega a casa. Siempre teniendo en cuenta que esto se debería realizar después que el pequeño coma.
2.Continuar con 40 min. para hacer tareas.
3.Seguir con media hora de descanso.
4.Dos módulos de 25 minutos cada uno con una pausa entremedio de 15 minutos. Aquí una opción es buscar las materias más complicadas del día o en la que los niños se sienten más débiles, que ellos lean esto, la comprendan y luego con sus palabras resuman en una hoja esto, para luego archivar en la materia correspondiente.
5.Arreglar la mochila y los materiales para la jornada siguiente.
6.Jugar, comer, compartir y nuevamente descansar.
7.A eso de las 21:30 horas aproximadamente el niño debe acostarse y leer 20 minutos del libro del mes.
Si con el pasar de los días se observa que el niño no logra resumir y no comprende lo que lee, entonces es necesario consultar la opinión de un psicopedagogo para descartar dificultades de aprendizaje, Déficit atencional, entre otras alternativas.