El Departamento de Gastroenterología de la Escuela de Medicina de la UC han publicado recientemente un artículo de revisión en la prestigiosa revista internacional «Nature Reviews Gastroenterology and Hepatology», donde analizan la intersección entre la enfermedad del hígado graso no alcohólico y la enfermedad hepática relacionada con el consumo de alcohol.
Fecha: 13 de septiembre 2023
El Dr. Marco Arrese, Profesor titular del Departamento de Gastroenterología de la Escuela de Medicina, en colaboración con los Doctores Luis Antonio Diaz y Juan Pablo Arab, además de dos investigadores extranjeros (Alexander Louvet de Francia y Ramon bataller de España), han publicado esta revisión bajo el título «Enfermedad hepática asociada al alcohol y enfermedad del hígado graso no alcohólico«.
Tanto la enfermedad del hígado graso no alcohólico (NAFLD) como la enfermedad hepática relacionada con el alcohol (ALD) son las principales causas de enfermedad hepática crónica a nivel mundial. En muchos pacientes, ambas condiciones coexisten, siendo la disfunción metabólica y el consumo de alcohol factores etiológicos de la esteatosis hepática. El consumo perjudicial de alcohol es la causa principal de cirrosis en todo el mundo, afectando hasta el 50 % de los pacientes y contribuyendo significativamente a la carga global de enfermedades hepáticas. Por otro lado, la epidemia de obesidad y diabetes mellitus desempeña un papel determinante en el aumento constante de la prevalencia de la enfermedad hepática crónica.
El objetivo principal de este artículo de investigación es revisar la información disponible sobre NAFLD y ALD, así como su coexistencia, además de presentar la nomenclatura recientemente propuesta para describir el espectro del hígado graso. Se enfatiza que, actualmente, no existen datos que respalden la recomendación de un nivel seguro de consumo de alcohol en pacientes con hígado graso.
También se revisa la evidencia epidemiológica que muestra que la prevalencia tanto de NAFLD como de ALD ha experimentado un aumento en la última década debido al incremento de los factores de riesgo cardio metabólicos y al aumento del consumo perjudicial de alcohol en numerosos países.
Por esta razón, es crucial que los pacientes con enfermedad del hígado graso sean evaluados tanto en relación con el síndrome metabólico como con el consumo de alcohol, lo que permitirá mejorar el pronóstico y adoptar un enfoque de medicina personalizada en su tratamiento.
