Medicina Familiar
Riesgos cardiovasculares de las tiazolidinedionas
Riesgos cardiovasculares de las tiazolidinedionas en DM2
Autor: Dra. Luz Montero. Docente Medicina Familiar UC.
Introducción
Como vimos en un artículo de año 2010 la prevalencia de la Diabetes Mellitus tipo 2 en Chile de 4,2% (1) y va en aumento. Por otro lado el nivel de compensación (HbA1C < 7%) de los pacienets es bajo (34,16%) (2) y dentro de nuestra población diabética, a nivel nacional, el 88,5% tiene conocimiento de su diagnóstico, el 74,5% de los diabéticos están en tratamiento y el 19,7% de los diabéticos están compensados (1). Por otra parte, la DM tipo 2, es la décima causa de AVISA por causas específica en el país (3). Tratamiento
Como tratamiento contamos con la dieta, el ejercicio,los fármacos orales (HGO) tales como las biguanidas, las sulfonilureas, las tiazolinedionas, los inhibidores de la DPP-4 y los secretagogos no sulfonilureas y los fármacos inyectables (insulina).
En el artículo Hipoglicemiantes Orales, ¿Vale la pena un control glicémico estricto? del año 2010, revisamos en extenso los mecanismos de acción de las distintas drogas de uso oral y algunos de sus riesgos y beneficios.
Riesgo cardiovasculare de la rosiglitazona
El BMJ publicó recientemente (4) una Revisión Sistemática cuyo objetivo fue determinar los efectos comparativos de las tiazolidinedionas (rosiglitazona y pioglitazona) en el infarto de miocardio, insuficiencia cardíaca congestiva, y la mortalidad en pacientes con diabetes tipo 2.
El diseño fue una revisión sistemática y meta-análisis de estudios observacionales. Las fuentes de búsquedas fue en Medline y Embase, en septiembre de 2010.
Se seleccionaron aquellos estudios observacionales que compararon directamente el riesgo de eventos cardiovasculares de rosiglitazona y pioglitazona en pacientes con diabetes mellitus tipo 2.
Se encontraron 16 estudios observacionales (cuatro de casos y controles y 12 de cohorte retrospectiva), con 810 000 usuarios de tiazolidindiona.. En comparación con pioglitazona, el uso de rosiglitazona se asoció con un aumento estadísticamente significativo en las probabilidades de infarto de miocardio (n = 15 estudios, OR 1,16, IC 95% 1,07 a 1,24, p